En estos momentos de pandemia todos estamos en una montaña rusa de emociones y preocupaciones mientras vemos las sombrías noticias diarias en televisión sobre una crisis sanitaria y económica que viene para quedarse un tiempo indefinido. Esto genera mucho estrés en la sociedad.
¿Qué le hace el estrés al cuerpo?
Los profesionales de la salud mental manifiestan que los altos niveles de estrés pueden debilitar el sistema inmunitario. Además, el estrés repetido es un desencadenante importante de inflamación en el cuerpo. Y la inflamación puede afectar negativamente a la motivación, lo que lleva a la depresión .
Para una persona que vive con ELA, tener un sistema inmunitario fuerte y contener la inflamación son objetivos de salud importantes, y ayuda a defenderse del coronavirus.
¿Cómo podemos esquivar el estrés?
Cada persona puede crear su propio kit de herramientas contra el estrés. Como norma general en momentos de estrés es bueno preguntarse: ¿cómo me siento?, ¿qué necesito? y ¿quién o qué puede ayudarme? Con estrés nos sentimos emocionalmente exhaustos. Lo que necesitamos es una distracción fácil, para que el cerebro «descanse». Lo que me ayuda puede ser… ¡reír! Reír es un buen comodín, aunque cada persona puede desarrollar su propio sistema de autoayuda.
Buscar todos los días algún momento para reírse. Reírse de divertidos vídeos, de la escasez de papel higiénico compartida en Facebook, de las bromas caseras que circulan por whatsapp o en redes sociales, reírnos de nosotros mismos… porque el aburrimiento puede generar creatividad y humor del bueno.
El humor calma los nervios, hace cosquillas en los huesos y disminuye las hormonas del estrés. El humor funciona.
Importante, todos debemos buscar al menos 10 minutos al día para reírnos. La risa lleva más oxígeno a los pulmones, estimula el corazón, aumenta la inmunidad y está relacionada con el alivio del dolor.
Todos tenemos diferentes formas de evadir nuestro estrés. La clave es saber qué funciona para mí y luego emplearlo.
Juntos, podemos sobrevivir a la crisis de COVID-19 y vivir bien mientras vivimos con ELA.
